La decisión es un deseo ardiente personal, un horizonte sin límites que impulsa lo mejor de ti hasta convertirse en una motivación constante. Es algo personal; nadie ni nada debería interferir. Si es influenciada directamente, no se sostiene.

El propósito es el significado que le das a tu decisión. Es el reconocimiento de la fuerza interna que te impulsa, actuando como fuente de motivación para alcanzar objetivos y superar desafíos.

El camino son los pasos que te irá conduciendo a tu realidad ideal. Es definir el proceso de logros por alcanzar que te acercará hacia la meta donde quieres llegar. Es necesario estar alerta y reformular la dirección constantemente al sentir distanciarnos.

El Flow es el diseño de la rutina que te hará navegar hacia tu destino.

Es el curso del camino que te desliza en el río. Una rutina apropiada se conecta con tu decisión y se vuelven hábitos que te llevarán a la meta con esfuerzo y gozo.

Es el ambiente que creas para el éxito. No puedes estar cerca de personas que estorben tu visión, no puedes visitar lugares que te desenfoquen y te hagan perder energía. Es tu creación, no hay excusas.

Es tu Identidad Secreta, aquella que te permite alcanzar aquello que no has podido hasta el momento. Tu YO más elevado o alter ego. Puede ser una creación compuesta de modelos y héroes con valores definidos y motivados por un detonante.